miércoles, 17 de agosto de 2011

No me he dado cuenta....

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Nada gente, que aquí seguiré, hablando a nadie.
Ya que he hablado del disco en que más cómodo me siento de la discografía de Radiohead, porqué no hablar del disco en que menos cómodo me siento?

En este caso, el premio se lo ha llevado Amnesiac. Este tampoco es el mejor disco de RDH para mi gusto, el cual tampoco voy a comentar en esta entrada.

Amnesiac conlleva el salto definitivo a otro tipo de música, otros tipos de melodías, harmonías e instrumentos que empezó con Kid A. El ambiente del disco es más sobrio, oscuro, claustrofóbico y aplastante. La voz de Yorke no hace las de cantar, solloza frases melancónicas del compacto sonido de todas las canciones del disco.

Eso sonidos, ritmos y voces me trasladan a un estado sentimental depresivo y triste.

Amnesiac/Morning Bell le aporta un sonido distinto, más denso y concurrido que sus hermanos, al igual que con Knives Out, se recupera el estilo duro y guitarrista de sus anteriores creaciones.

Lo malo del disco es eso, el estado emocional al que me traslada, un lugar depresivo, triste y sin sentimientos profundos, algo superficial y desgarrador. Algo que no puedo escuchar sin forzarme o cansarme de ello. Algo en lo que sin duda, Radiohead ha dado "el" salto a otro estilo y otras harmonías y melodías.

Y lo que es peor, es que no puedo captar, procesar y entender todos los sonidos y letras de sus canciones. Algo que duele, ya que uno no debe perderse ninguna creación de los chicos de Oxford.

martes, 16 de agosto de 2011

Supongo que el disco que más me ha gustado, marcado o maravillado ha sido OK Computer, de los genios de Radiohead.

Eso sí, los super-intelectuales de la música no dirán que sea el mejor, pero es en el que me he sentido más cómodo. Sus melodías simples y el soberbio uso de los instrumentos (los cuales dejarían un poco de lado en su siguiente disco, por un sonido más profundo, complejo e informatizado) me enamoraron en su día. Pero no fue su apartado técnico el que me conquistó, si no el hecho de poder escuchar el álbum entero sin "sufrir" o calentarme la cabeza para captar, procesar y entender los sonidos (no letras, que en eso Thom es un demonio, un ángel y un genio poeta), su fácil digestión para cualquier cerebro, para que cualquier persona con un gusto musical mínimo comprenda, evalúe y entienda las armonías y melodías de cualquier canción del disco.

Sobran las palabras para describir las sensaciones que se asoman a tus impulsos cerebrales, llenándote de felicidad, comodidad y sentimentalismo cuando se escuchan los soberbios temas que componen OK Computer. Sensaciones, que uno debe "vivir para creer", o más bien dicho "escuchar para sentir".

Un saludo gente!